El mundo de las criptomonedas es nuevo, arriesgado e impredecible, pero Forbes ha sacado a relucir una lista de las personas que se han convertido en multimillonarios de la noche a la mañana confiando de acuerdo sus instintos e invertir en criptomonedas cuando el momento es el correcto.
El principal criptomillonario, por así decirlo, es Chris Larsen, quien posee un patrimonio neto estimado de hasta USD 20 mil millones posicionándolo de primero en la lista de los criptomaníacos. Desde entonces las fichas de XRP, de las cuales él posee 5,2 mil millones.
Binance, el mayor intercambio de criptomonedas en el mundo llegó a este nivel en solo 180 días desde su inicio. Fue fundado por CZ (Changpeng Zhao), un codificador chino-canadiense de 41 años con experiencia en el sistema de comercio de alta frecuencia en el Wall Street, el mayor centro financiero mundial. Binance puede procesar 1,4 millones de transacciones por segundo. Hay 120 monedas disponibles para negociar, y la plataforma generó una ganancia de USD 200 millones solamente durante el último trimestre.
De las casi más de 1.500 criptomonedas que se han creado tienen un valor agregado de USD 550 mil millones, lo cual significa un aumento de 31 veces desde el inicio del año 2017. Según Forbes, el cambio de precio promedio de Bitcoin, Ethereum y XRP en 2017 fue de 14.409%, consideradas las monedas más populares.
Los criptomillonarios
Las clasificaciones también son indicativas de la naturaleza relativamente incipiente de la industria incluye a individuos que fundaron compañías y monedas hace menos de un año, pero hoy se consideran multimillonarios en función de las valoraciones del mercado y los volúmenes de negociación. Además poseen buen olfato para invertir en criptomonedas.
Lista Forbes de los criptoricos del año 2018:
Chris Larsen, cofundador de Ripple: $ 7.5 a $ 8 mil millones
Joseph Lubin, cofundador de Ethereum: $ 1 mil millones a $ 1.5 mil millones
Changpeng Zhao, CEO de Binance: $ 1.1 mil millones a $ 2 mil millones
Cameron y Tyler Winklevoss, cofundadores de Gemini: $ 900 millones a $ 1.1 mil millones
Matthew Mellon, inversor individual: $ 900 millones a $ 1 mil millones
Brian Armstrong, CEO de Coinbase: $ 900 millones a $ 1 mil millones
Matthew Roszak, cofundador de Bloq: $ 900 millones a $ 1 mil millones
Anthony Di Iorio, cofundador de Ethereum: $ 750 millones a $ 1 mil millones
Brock Pierce, presidente de la Fundación Bitcoin: $ 700 millones a $ 1 mil millones
Michael Novogratz, CEO de Galaxy Digital: $ 700 millones a $ 1 mil millones
Brendan Blumer, CEO de Block.one: $ 600 millones a $ 700 millones
Dan Larimer, CTO en Block.one: $ 600 millones a $ 700 millones
Valery Vavilov, CEO de Bitfury: $ 500 millones a $ 700 millones
Charles Hoskinson, cofundador de Ethereum e IOHK (Cardano): $ 500 millones a $ 600 millones
Brad Garlinghouse, CEO de Ripple: $ 400 millones a $ 500 millones
Barry Silbert, CEO de Digital Currency Group: $ 400 millones a $ 500 millones
Vitalik Buterin, Creador de Ethereum: $ 400 millones a $ 500 millones
Una industria desigual
El aumento de millonarios en criptomonedas ha sido exageradamente exponencial e impresionante, por tan solo invertir en criptomonedas. Pero no se oculta el hecho, de que la industria ha ofrecido recompensas con cierta desigualdad. Los inversores se han lanzado en picada para beneficiarse del arduo trabajo de los desarrolladores. ¿Igualdad de condiciones?
Como señala Nathaniel Popper del diario norteamericano, New York Times, los desarrolladores prominentes no han llegado a ganar mucho dinero que se diga por su trabajo. Por ejemplo, Jed McCaleb de la criptomoneda Ripple no parece haberse beneficiado tanto del aumento de los precios de sus criptomonedas como lo han obtenido sus propios inversores y demás directores generales. Eso quiere decir, que vale más invertir en criptomonedas, que en la codificación y generación de las mismas.
De manera similar, Vitalik Buterin, de 24 años, quien desarrolló la plataforma de contrato inteligente Ethereum, ocupa el distante decimoséptimo lugar, muy por debajo de sus otros cofundadores, Lubin y Anthony Di-Loro, uno de los primeros inversores en la plataforma. A pesar de toda la locura de las criptomonedas beneficia al mejor postor, gracias a la especulación.
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