Para los que me leen muy amenudo seguro será sorpresa leer este post después de meses de ausencia.
Y es que en realidad este es el primer post del 2020 en mi blog.
Después de culminar los cursos de tesis 2019 en la universidad, sentía algo que no me dejaba avanzar.
En Enero no podía dar el 100% a mis labores del día a día.
El Motivo: Estaba estancado, me frustré
Así que en Febrero decidí viajar.
Hace poco regresé de Europa (por cierto todo bien de salud).
Entre las cosas que hice un poco en Europa fueron visitar Austria, Alemania, República Checa, Francia y finalmente España.
En este viajé logré encontrarme con amigos y familiares que no veía después de muchos años, compartir comiendo jamón ibérico, tomar una cerveza alemana o un tinto de verano y comer comida típica en Praga son cosas que un latino hace pocas veces.
Del mismo modo ya en Madrid pude conocer el IE Business School en Madrid por dentro gracias a Gema Molero que me recibió, quedé fascinado con los programas que ofrece el IE.
Ese mismo día por la tarde aproveché en visitar el Google Campus Madrid y pude interactuar con una comunidad de emprendedores.
Estos 2 primeros meses del 2020 pasaron muy rápidos, fueron muy cargados entre trabajo, vuelos y trenes.
Pero,
¿Por qué me sentía estancado?
Las razones los voy a comentar en el desarrollo de este artículo.
Y una de las cosas que aprendí a valorar a mi corta edad es la importancia de la resiliencia, algo que deberían enseñarnos en la escuela.
Así te invito a leerlo de inicio a fin.
Empecemos …
Contenidos de esta página
¿Cuál es mi historia?
Cuando tenía 21 años empecé mi primera empresa (2016).
Pasé por buenos momentos, conocí mucha gente importante.
Conseguimos capital semilla.
Trabajé mucho.
Viajé mucho, conocí lugares que solo me imaginaba en fotos, estuve en países como España, México, Colombia, República Dominicana, etc.
Y no eran viajes por placer, eran viajes por concursos, foros, invitaciones a la nueva empresa (startup) que habíamos creado.
En Marzo del 2017 lanzo una app al mercado peruano, app para que las personas puedan ubicar el mejor precio de sus medicamentos.
A las pocas semanas conseguimos un número significativo de descargas.
En Mayo 2017, fui becado por la Embajada de Israel para estudiar Innovación & Emprendimiento en Haifa, Israel.
En Israel pude conocer su cultura emprendedora y conocer hermoso lugares como Jerusalem, Nazareth, TelAviv, entre otros.
A mi regreso a Lima, Perú seguimos trabajando en la startup.
Como una motivación personal en agosto del 2017 decido crear mi blog.
Comencé a escribir artículos como hobby.
Por otro lado empezamos a salir en diarios, revistas y tv con la startup.
Esa «suerte» me costó ser disciplinado, dejar de salir a cenar con amigos y empezar a trabajar los fines de semana.
En el 2017 empieza mi interés por aprender SEO y empecé.
Hasta aquí era la historia maravillosa de todo joven emprendedor universitario que fundaba su empresa y viajaba por el mundo.
¿Dónde el estanco?
Ya para fines del 2017, el financiamiento se iba acabando.
Tocaba el 2018 tocar puertas = levantar capital.
Para ese entonces habíamos desarrollado diferentes productos y perdimos el foco.
Mientras intentabamos levantar capital en un ecosistema como Perú, nos quedamos sin caja.
Las cuentas estaban en rojo.
Quebramos.
A diferencia de una empresa tradicional, las startups dependen mucho del financiamiento ya que con este pueden seguir creciendo.
Fueron 4 años de mucho aprendizaje, de los cuales demoré 1 año en aceptar las cosas que hice mal.
En el 2019 por fin solté la cuerda
¿Resiliencia o Depresión?
Conocí que la vida no siempre es cómoda.
Aprendí que si quieres emprender, necesitas vender.
Aprendí la diferencia entre un negocio tradicional (por ejemplo: consultoría) y una Startup.
Aprendí que todos no están dispuestos asumir los mismo riesgos.
Aún recuerdo que un amigo de la universidad me enseñó el concepto de esta palabra que todos debemos conocer: Resiliencia.
Leí
Me adapté, fui muy flexible y empático con las cosas.
Se acabaron los viajes …
A nivel de proyectos y/o negocios no dejaba pasar oportunidades que se aparecían.
Para eso en el 2018 escribía artículos en mi blog
… 2019 seguía escribiendo
Y la sorpresa aquí.
A fines del 2019 veo las métricas (visitas) que tiene mi blog y encuentro
+10 000 visitas al mes ¡El SEO si funciona!
Nace KM Digital
Desde que lancé mi app al mercado en el 2017 y le hice frente a los grupos de poder en Perú (monopolio) he concebido el uso de la tecnología de forma diferente.
Mi concepción del mundo empieza primero como Sapiens y luego como hombre máquina.
Se que la tecnología puede hacer que el mundo sea más justo y feliz.
Se que con la tecnología la burocracia y corrupción pueden eliminarse.
Se que con la tecnología puedes pagar un precio justo de un medicamento.
Tomé una decisión
Así que a fines del 2019
Fundé Kevin Melgarejo Digital como una empresa personal.
En el cual ofrecemos diferentes servicios.
Hoy al 2020 ya tenemos clientes no solo en Perú 🙂
El objetivo para este 2020: Tener 1 millón de visitas al mes.
Y para el 2021, tener clientes en todo el mundo.
¿Por qué escribo?
Porque quiero que sepas que muchos problemas del mundo se pueden acabar usando la tecnología.
¿Qué planes con KM Digital?
Para nuestros objetivos, trabajaremos en base a la Transformación Digital, Productos digitales/Startups/Spinoffs, Escuelas de formación y Apoyo a emprendedores.
Actualmente tenemos,
Fakturame: Software de facturación electrónica basado en Odoo para Pymes en Perú que montamos en el 2019, el cual estamos en conversaciones con otra empresa local para unir fuerzas. ¿Fusión? El tiempo lo dirá.
Uberfy: Software Saas para crear una aplicación como Uber, Caby, Glovo, etc. para compañías de taxis y delivery. Donde ya tenemos clientes no solo en Perú.
Disruplab: Consultora de Transformación Digital / Innovación para ayudar a las pymes en su proceso de crecimiento de la mano de la tecnología.
¡Lo mejor está por venir!
Muchas de estás cosas no se hacen de la noche a la mañana.
Es un proceso, es tiempo.
Es mucho apoyo de las personas cercanas.
Finalmente,
Quiero terminar este artículo agradeciéndote por llegar hasta aquí.
Ser gentil, pedir disculpas y ser mejor persona no cuesta nada.
Y recordar que el dinero siempre se hace y no será un problema para quienes sabemos trabajar, ahorrar y compartir en reciprocidad.
Seguiré creando cosas, seguiré en esta lucha de emprender y de mejorar la vida de las personas desde mi tribuna.
Aquí una foto en la Torre Eiffel, Paris, Francia.
¡Te quiero pedir algo!
Si conoces personas que frente a las adversidades aún no pueden salir adelante, te invito que compartas este artículo
Hasta un próximo post.
Tu amigo,
Kevin Melgarejo