Hemos aseverado en publicaciones anteriores que antes de diseñar debemos pasar por un proceso investigativo. La Investigación en el diseño UX es relevante y con ambos dedos arriba; reconocemos que ha ido tomando fuerza dentro de las empresas y organizaciones. Las empresas han adoptado la idea de que la innovación significativa requiere comprender a sus clientes como seres humanos con vidas complejas.
También, si recorremos la web, encontraremos muchos comentarios sobre los mitos, percepciones erróneas y hedge repetidos. Por esta razón, hemos decidido escribir sobre las reglas básicas para que la investigación en el diseño UX sea exitosa dentro de tu emprendimiento.
En primer lugar siéntete cómodo estando incómodo
«Todo lo que sé es que no sé nada». – Sócrates
Todos hemos sido educados para valorar respuestas y temer preguntas, esta es la verdad. Acaso no fuimos recompensados por respuestas correctas en la escuela?; de hecho, aún somos recompensados por ideas brillantes en el trabajo. No es de extrañar que muchas personas busquen razones para evitar hacer investigación, especialmente investigación cualitativa.
Investigar objetos de estudios subjetivos, cambiantes, complejos, genera mucha ansiedad en el investigador. Por lo menos la investigación cuantitativa nos aporta métodos que poseen familiaridad reconfortante de las pruebas estandarizadas.
Mantener una mentalidad de investigación en el diseño, significa tener en claro que el prejuicio es desenfrenado; la certeza es una ilusión, y cualquier respuesta tiene una vida útil corta. Una buena pregunta es mucho más valiosa a largo plazo. Debemos como investigadores admitir que no tenemos todas las respuestas; hasta entonces, no podremos hacer buenas preguntas y nuestra capacidad de aprender se verá acortada.
Pregunta primero, haz el prototipo después
«Si solo probamos abrebotellas, es posible que nunca nos demos cuenta de que los clientes prefieren botellas con tapa de rosca». – Victor Lombardi en ¿Por qué fallamos?
Lógicamente hay una prisa por prototipar y probar el prototipo. Un prototipo es una respuesta, y es tangible, incluso si es simplemente un boceto en papel. Esto es cómodo, mucho más cómodo que solo hacer preguntas. Para cualquiera que esté interesado en demostrar su valor haciendo un progreso rápido y visible, hacer preguntas parece ser improductivo.
Por esa razón te alertamos. El peligro en la creación de prototipos demasiado pronto; es invertir recursos para responder a una pregunta que nadie hace, e ignorar el costo de oportunidad.
Probar un prototipo puede ayudarlo a refinar una idea que ya es buena, no a decirle si está resolviendo el problema correcto.
Y es fácil confundir el brillo de un prototipo con la calidad de la idea. También es fácil confundir el brillo de un informe de investigación en el diseño con el valor de las estadísticas.
En lugar de guardar y defender ideas débiles; hacer las preguntas correctas lo ayuda a identificar y erradicar las malas ideas más rápidamente. Solo tienes que ser lo suficientemente seguro de ti mismo como para abrazar el error.
Fuente:medium.com
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