Se creo un nuevo método para detectar cáncer cervicouterino. Se trata de un producto para hacer el papanicolau de manera sencilla. Responsables alegaron que quieren que «cambie la experiencia en la toma y análisis de las muestras de este examen médico«.
«La idea surgió cuando una compañera se hizo el papanicolau nos contó y empatizamos con que es una experiencia incómoda».Así detalló María del Carmen de la Parra, alumna de la carrera de diseño industrial del Tecnológico de Monterrey, Campus Puebla.
Por esto los estudiantes desarrollaron EVE Cervical Screening es un dispositivo casero del tamaño de un tampón. Por medio de biomarcadores puede detectar inmediatamente, las células cancerígenas y precancerígenas en el cuello uterino.
«La finalidad es hacer del chequeo algo rutinario, personal y no invasivo, que promueva la cultura de un chequeo frecuente, previniendo miles de muertes y dolorosos tratamientos», explicó De la Parra.
Ellos quisieron desarrollar un producto que tome la muestra, analizara instantáneamente y fuese accesible como una prueba de embarazo. Los estudiantes realizaron una encuesta. El 93 % de las mujeres participantes confesaron no hacer el papanicolau por miedo o vergüenza. «Sentían que era una experiencia muy invasiva: desvestirse, sentarse en la camilla, abrir las piernas y permitir la revisión«. Aseguró De la Parra.
Según la Organización Mundial de la Salud(OMS), en América Latina el cáncer cervicouterino es la segunda neoplasia más común en mujeres, con 68.818 casos anuales. En México, se estima una ocurrencia de 13.960 casos. Además, en datos de la Secretaría de Salud de 2015 tiene una incidencia de 23,3 casos por 100.000 mujeres.
El cáncer cervicouterino se trata facilmente siempre y cuando se detecte a tiempo. No obstante 12 % de las muertes por cáncer en mujeres en México se deben a esta enfermedad, en cifras de la OMS.
Se espera poder concretar el nuevo método para detectar cáncer cervicouterino pronto y sacarlo al mercado. Cualquier mujer podrá usarlo pero se proyecta el mayor beneficio en mujeres entre 20 y 35 años.En el proyecto trabajan estudiantes de las licenciaturas de Diseño Industrial, Ingeniería Biomédica y de Administración de Empresas. EFE
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